jueves, 12 de julio de 2012

No doy pa'más

"El verano ya está aquí"
Por varios motivos, he estado descolgada del "mundo virtual" durante una temporada. Primero fue un repunte de trabajo, luego una gastroenteritis de las burras. Sin tiempo a recomponerme nos fuimos una semana de vacaciones en un sitio perdido de la mano del wi-fi. Y a la vuelta, me esperaba una semana que entre el siguiente repunte de curro (eso me pasa por irme de vacaciones en temporada alta) y unas bajadas de tensión inoportunas me han tenido con la lengua fuera (pero con el estómago de niño en montaña rusa).

Total, que estoy que ya no doy más de mí. La niña lo nota, y está de rabieta en rabieta, y durmiendo las horas de oscuridad, vamos, de 11 a 6 de la mañana. Agotador. Ya le hemos dicho que si tiene ganas de madrugar que madrugue, se levante, haga pis y juegue con sus juguetes, pero a los papis ni pío hasta que suene el despertador. Gracias a eso, llevamos un par de días sintiéndonos más persona.

Pero si la desconexión con la "vida real" está siendo fuerte últimamente, la desconexión con la "vida virtual" ha sido casi completa. No enciendo el ordenador más que para trabajar y para leer el periódico (y de eso me arrepiento cada vez que lo hago...). Así que siento no haberos respondido a vuestros amorosísimos comentarios de la semana pasada, y no haberme pasado por vuestros blogs, pero de verdad que no he podido.

Esta semana seguiré con mogollón de curro, y luego me voy con Pollito y mis papis de "retiro espiritual". Vamos, que nos vamos a la playita, y espero que mi madre se apañe un poco con la niña y yo pueda descansar un poco y entrar en equilibrio con mi tensión y con mi estómago, y podamos hacer las paces entre todos. El "pobre" Guardabosques se queda de Rodríguez, con sentimientos encontrados entre el "qué solito me quedo, os voy a echar mucho de menos" y el "¡genial! una cama de 1.80 para mí sólo y a dormir todita la noche del tirón".

Nos vemos en 10 días, a ver si recargo las pilas, que tengo un montón de posts en la lista de "para escribir", de restaurantes chulos, excursiones y cositas sobre perros.

En el calor del verano es cuando la pereza resulta respetable (Sam Keen)
¡Que descanséis!

Teresa Marías www.psicologiaveterinaria.es