lunes, 8 de septiembre de 2014

Ahora somos una más


Vuelvo de las "vacaciones" blogueriles, no sé si para reenganchar, o para tomarme el blog de una forma distinta. Creo que tengo que asumir que el ritmo de publicación del año pasado no voy a volver a conseguirlo, y voy a tener que contentarme con una entrada cada quince días (¿o al mes?) porque cada vez tengo más lío, en vez de menos. Soy así, en cuanto parece que tengo la cosa controlada... la vuelvo a liar.

Y esta es mi nueva lianta, mi nueva socia:


Kiara, Kía para los amigos (y "Bruma de Sierracavernas" para el LOE).

No tenía yo pensado coger otro perro. Bueno, imaginado sí, pero en abstracto, en "futurible". Y la idea era coger otro perro pequeño, un schnauzer mini, o un pastor de shetland... algo así.

Peeerooo...
¡¡Mi amiga D tiene la culpa!!

Hace un mes se puso a colgar en su página de Facebook las fotos de su última camada. Ella y su marido I, amigos míos desde hace ya casi diez años, compañeros míos del máster de etología, se dedican (entre otras muchas cosas) a criar y entrenar pastores alemanes. Unos pastores alemanes increíbles. De línea de trabajo, de color gris, con un carácter impresionante. Son equilibrados, recios pero sensibles, capaces de jugar tranquilamente con su niño de tres años y acto seguido salir a la pista a trabajar.


No podía dejar pasar la oportunidad. Me costó convencer a Guardabosques, que en estas cosas es la voz de la razón, y decía que ya teníamos suficientes jaleos en la vida... pero al final... una semana de obsesión pensando en lo bien que me venía ahora una cachorra nueva... puede hasta con Guardabosques. El que yo tuviera capricho de pastor alemán alobado desde los tres años, supongo que también influyó en algo. Y que conociéramos a ambos padres de la cachorra, desde hace años, y sepamos que el carácter de ambos no puede ser mejor, también.

Mi amigo Alejandro (de "Tu perro en tu vida") también tiene algo de culpa, que conste. Me he dejado convencer (ya sabéis que yo para esas cosas facilona, me apunto a cualquier bombardeo perruno) para montar un grupo de trabajo. Alejandro tiene (por ahora) cuatro malinois en preparación, y entre los dos queremos montar un grupo de IPO aquí por la sierra. En positivo, y con estructura, que el trabajo deportivo en este país todavía está bastante en manos de adiestradores de vieja escuela, con collar de ahogo o de descargas y perros acogotados. Queremos mostrar que el trabajo deportivo en positivo no sólo es posible, es que funciona incluso mejor.

Por ahora, con dos mesecillos recién cumplidos, Kía no está para salir a pista. Pero nos estamos divirtiendo un montón sentando unas buenas bases, clickeando buenas conductas y aprendiendo a perseguir pelotas y dejar en paz los cordones de los zapatos. Y cómo jugar con niños y bebés, y lo bien que se duerme en un transportín, y que si se hace pis en la hierba hay lluvia de premios... esas cosas.


Lo principal, que correr hacia mí siempre, siempre tiene premio.

Tengo que agradecer infinito a mis amigos I y D por la oportunidad de vivir y trabajar con esta perra. Es dulce, cariñosa e inteligente, con chispa, pero con "botón de off". Todo lo que yo necesitaba en un perro, y lo que no había pensado buscar, hasta que ellos me la pusieron en la cabeza y luego en los brazos. Siempre estaré en deuda con vosotros, espero que los éxitos que logremos los podamos compartir y celebrar juntos.

Por cierto, que si alguien vive en Benavente (Zamora) o alrededores, y tiene ganas de trabajar con su perro, o tiene algún problema de conducta, estos dos etólogos estarán encantados de ayudar. Mandadme un privado y os paso el contacto. Y creo que todavía les queda algún hermano de Kía, ¡por si estáis tan locos como yo!

Ya os iré contando más cosillas, que lo que iba a ser un repaso de vuelta al cole, se ha convertido en un monográfico perril ¿Por qué será?



Teresa Marías www.psicologiaveterinaria.es www.clinicaveterinarya.com ¡Sígueme!